Tras visitar al dentista de Mataró
te preguntas qué puedes comer y más si tienes que ir a un evento o una fiesta. Dolor,
inflamación, incomodidad… Las intervenciones quirúrgicas en el dentista como
una extracción de muela o la colocación de un implante pueden ser muy molestas,
y aún más cuando nos incapacitan para comer con normalidad durante una
temporada. Dependerá de las horas y de qué tipo de tratamiento o intervención
se te haya hecho. No es lo mismo una intervención como implante que un empaste
o una limpieza bucal.
Cada tratamiento tendrá unos
tiempos de respuesta. as horas inmediatamente posteriores a la intervención son
las más críticas. La herida es reciente y el efecto de la anestesia aún
perdura, por tanto, es conveniente no forzarla. Durante las primeras 24 horas
se tienen que comer alimentos fríos o tibios, de textura blanda y que sean
nutritivos y faciliten la cicatrización. Comer helado es ideal porque el frío
es vasoconstrictor natural y ayuda a bajar la inflamación, disminuye el sangrado
y tiene un afecto anestésico que alivia el dolor. Comer sopas, purés y cremas
por su textura líquida o cremosa que facilita la ingesta sin masticación. Si lo
que te realizas es una ortodoncia
en Mataró lo más probable es que al principio no puedas ingerir mucha comida
ya que te tienes que adaptar.